Microinstrucciones

En la organización de una unidad de control microprogramada, las instrucciones de máquina se dividen en microinstrucciones más simples que son almacenadas en una memoria llamada ROM de microprograma. Estas microinstrucciones realizan operaciones básicas y son ejecutadas en un ciclo de reloj, siendo la unidad de control quien se encarga de seleccionar las microinstrucciones adecuadas para ejecutar cada instrucción de máquina.

Las microinstrucciones suelen ser divididas en dos tipos: microinstrucciones de control y microinstrucciones de operación. Las microinstrucciones de control se encargan de la secuencia de ejecución de las microinstrucciones y del control de las señales de control de los componentes del procesador, mientras que las microinstrucciones de operación realizan operaciones aritméticas y lógicas básicas, transferencia de datos entre registros, etc.

Las microinstrucciones son almacenadas en una ROM de microprograma que puede ser actualizada o modificada para corregir errores o para añadir nuevas instrucciones a la CPU sin tener que cambiar el hardware. Además, la utilización de microprogramas permite un diseño más modular del procesador, lo que facilita su desarrollo y mantenimiento.

La unidad de control microprogramada se utiliza en procesadores de alta gama y en sistemas embebidos que requieren un alto grado de flexibilidad y programabilidad.